27 de febrero de 2012
Temática: Cables Sumergidos y SubmarinosEl laboratorio transmite en tiempo real a los laboratorios de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) datos recogidos en el suelo marino para que éstos puedan estudiar el fondo del Mediterráneo a través de internet.
Esta plataforma para la investigación ha sido diseñada y construida por el Centro de Desarrollo de Sistemas de Adquisición Remota y Tratamiento de la Información (SARTI) de la Escuela Politécnica Superior de Ingeniería de Vilanova i la Geltrú de la Universidad Politécnica de Cataluña y la Unidad de Tecnología Marina del CSIC, con la participación de varias empresas, entre ellas Prysmian. El proyecto ha sido financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación y el Ministerio de Fomento ha facilitado las gestiones administrativas de la infraestructura.
En principio, la plataforma permite estudiar tenues variaciones en la temperatura y la salinidad para comprobar la calidad del agua y la contaminación por residuos o el tránsito marítimo, y las señales acústicas existentes para evaluar la contaminación acústica. El proyecto se integra en la Red Europea de Observatorios Marinos ESONET.
La instalación científica está formada por dos cilindros. Uno de ellos integra la electrónica y el otro, el acoplamiento con los cables de alimentación del sistema. El primer cilindro incorpora las conexiones a tres sensores: una cámara IP, que graba imágenes del fondo marino, es manejable desde la estación terrestre para controlar su movimiento o enfocar, y resulta accesible a través de internet; un hidrófono, que registra variaciones acústicas en el medio marino; y un dispositivo CTD (Conductivity, Temperature, Depth), que mide la salinidad, la temperatura y la profundidad. Un cable de fibra óptica une la estación de tierra a un anclaje soterrado en la playa. De ahí se extiende hasta el laboratorio submarino. Este cable proporciona la energía y la transmisión de información (datos e imágenes registradas en los equipos instalados) de manera continua. Todo el sistema ha sido instalado por duplicado para poder ser sustituido en caso de avería.
La instalación permite ser usada para nuevos usos en el futuro, como identificación de riesgos geológicos, como la detección de terremotos y tsunamis, la monitorización de fallas sísmicas activas, erupciones volcánicas y desplazamientos submarinos, el estudio de la circulación oceánica, la variación del nivel del mar y los fenómenos meteorológicos. También puede aportar datos para el estudio del cambio climático, las interacciones físicas, químicas y biológicas que afectan a los organismos y ecosistemas marinos, los efectos ambientales provocados por los medios de transporte marítimos y el tránsito de los barcos en el puerto y la seguridad en el transporte de mercancías, entre otras cosas.
En un futuro se pretende trasladar este laboratorio a mayores profundidades, incluir más nodos y abrir el acceso a la plataforma a una amplia comunidad científica e industrial para realizar observaciones a partir de largas series temporales, además de proporcionar un campo de pruebas para el desarrollo de nuevos sensores marinos .